Fue un reconocido empresario chileno, nació en 1926 en Calama. Proveniente de una familia de inmigrantes, su padre era croata y su madre boliviana. Desde temprana edad, su entorno familiar le inculcó valores de perseverancia y trabajo arduo, sentando las bases de su futura trayectoria empresarial.
Desde su infancia, Andronico Luksic Abaroa demostró un talento innato para los negocios y una especial atracción por el sector minero. Su pasión por la minería lo llevó a explorar diversas oportunidades y a adquirir profundos conocimientos en esta industria que marcaría su camino en el futuro.
Tras completar sus estudios en la Universidad de Chile, decidió ampliar sus horizontes y buscar nuevas oportunidades en Francia. Aunque inicialmente tenía la intención de continuar sus estudios, su espíritu emprendedor lo llevó a adentrarse en el mercado cambiario y a incursionar en el sector automotriz en la ciudad de Antofagasta, donde comenzó a forjar su camino empresarial.