Bajo el patrocinio de la Academia de Humanismo Cristiano (AHC), fundada por el Cardenal Silva Henríquez, nace en 1977 Academia boletín informativo de la institución, el que en su segundo número ya adquirió el nombre definitivo de Análisis bajo la dirección de Juan Pablo Cárdenas. Pese a haber traspasado la difícil barrera de conseguir el permiso para la creación de un nuevo medio, la publicación mensual debió lidiar con la negativa de las grandes imprentas y organizar una red de pequeños centros para su producción. El apoyo financiero para su puesta en marcha y su funcionamiento provino de embajadas, gobiernos europeos y la Fundación Ford.
En 1980, se formó la Sociedad Periodística EMISIÓN la cual se hizo cargo de la revista. La llegada al arzobispado de Santiago del Cardenal Juan Francisco Fresno en 1983 significó el fin del patrocinio de la AHC y por lo tanto de cierto nivel de "inmunidad" que esta le otorgaba. Su posición a favor de la movilización social por sobre la negociación con la dictadura alejó a la publicación de la nueva autoridad eclesiástica.
La crisis económica desencadenada en 1982 llevó a que Análisis privilegiara la información económica, obviada por los noticiarios televisivos, entregando índices de desempleo y detalles sobre la quiebra de empresas. En su máximo tiraje llegó a sostenerse en un alto porcentaje por el canje de publicidad y por ventas, caso muy extraño para la época.
Análisis fue la primera revista que publicó cartas de personas en el exilio. El darle cabida a personeros de la Unidad Popular significó que sus directivos fueran enjuiciados por la Ley de Seguridad Interior del Estado. Durante los últimos años de dictadura varios periodistas fueron encausados por ofensas a la autoridad, entre ellos, Fernando Paulsen, Juan Pablo Cárdenas, Mónica González y Patricia Collyer.
Los Estados de Sitio impuestos a mediados de la década de los 80´ significaron cierres para la publicación durante los cuales se editó el boletín Prensa Libre , que repartido personalmente a sus suscriptores alcanzó los 150 números. El atentado a Augusto Pinochet se tradujo en el momento más duro que debió a afrontar el equipo de Análisis ,a causa del asesinato de José Carrasco, periodista y redactor internacional de la publicación.
En los debates sobre la futura transición la línea editorial se mostró reticente a la vía consensuada y a participar en el plebiscito de 1988, una vez recuperada la democracia la lucha prosiguió por alcanzarla plenamente, pasando por periodos de tensas relaciones con el gobierno de Patricio Aylwin. Finalmente la caída constante de sus ventas llevó a su cierre definitivo en 1993.